Pero todo comenzó antes que esto…
Primero teníamos un coro, el coro Kol Haneshamá que se reúne ya hace unos cuantos años, por si no lo recuerdan bien… es el que ameniza y acompaña con mucha calidad nuestra tefilot de Rosh Hashaná, Iom Kipur y representa a la congregación en cada evento que nos invitan. Siempre están allí.
Por otro lado, Fernanado Rahe, cantaautor argentino, de la ciudad de Córdoba (también tiene un coro como el nuestro) quien canta de todo, toca varios instrumentos, y uno en particular, para aquellos que tuvieron el privilegio de escucharlo, el looper.
Entonces, unimos al coro con Fernando y logramos más que música, como siempre digo… un sentimiento. Un taller espectacular, donde el coro puedo aprender de él y demostrar que es un gran grupo de gente y un excelente grupo musical.
Siguió a esto una cena de Shabat… pero no una cena como todas, realmente fuera de lo común, comenzamos con las bendiciones de siempre, iain, jalá, pero no pudimos terminar hasta haber cantando varias de las canciones de nuestro repertorio, las que conocíamos y las que no las aprendimos. Cantando y cantando se fue la noche de Shabat.
Pero eso no terminó allí. El concierto fue espectacular. No lo digo porque yo fui una de las cantantes… sino porque realmente fue de una calidad y calidez. Muy animado por cierto.
Entre canciones del repertorio israelí, ladino, idish, un poco de música en español y algunos temas inéditos. Terminando con la canción que me encantó “creáse o no” somos lo mismo, no nos separa ….ni un abismo… y latinoamérica unida es una fiesta.
Pero estoy segura que todos los que estuvieron allí tiene mucho más que decir… y aún siguen cantando “tanto para darte, tanto que decirte, tanto tengo para vos…”
Gracias a todos los que participaron, esperamos que hayan disfrutado tanto como nosotros. Para los que no… espero que haya una nueva oportunidad y no se la pierdan.
Nurit